Kerstin Erdmann
Curadora
La propuesta curatorial consistió en presentar, una exposición colectiva de 16 artistas: mexicanos, colombianos y de otras nacionalidades, residentes tanto en México como en el extranjero, la cual muestra un panorama general de lo que está sucediendo en el arte contemporáneo. El proyecto se desarrolló ex profeso para esta exposición.
Para la exhibición invite a reflexionar a los espectadores con piezas sutiles y casi minimalistas que cuentan con elementos filosóficos y de crítica social. La mayoría son piezas que requieren de un grado de contemplación que traiciona a aquel que se ve en una pintura o fotografía convencional. El texto explicativo que se encuentra en cada una de las salas es complemento o parte de la pieza, pues el significado o el mensaje no es evidente a simple vista.
Por otro lado, la manera en que técnicamente se resolvió el montaje de la exposición juegó un papel importante, pues las obras no llegaron embaladas y acompañadas por algún comisario, sino que la mayoría de estas fueron terminadas un poco antes de la inauguración de la exposición. La idea principal que vincula a todas las piezas es que son obras que literalmente caben en las maletas de la curadora. En la mayoría de los casos no se trata de piezas de formato pequeño, sino de obras que a través de bocetos, archivos e instrucciones han sido terminadas in situ por la curadora, asistida por personal asignado.
Estamos viviendo en una etapa del libre comercio marcada por la globalización en la que la inversión necesaria para organizar, desarrollar y montar una exposición arte, llega a ser muy elevada; en este sentido, uno de los mensajes de esta exposición es que deberían existir convenios que faciliten el libre intercambio de exposiciones alternativas no lucrativas en todo el mundo, ya que estas generan un conocimiento planeado fundamentalmente para la apreciación de un público y no para fortalecer la economía; como en el caso de la venta de arte que es implementada y motivada por las dinámicas del mercado.
El hecho de que se trate de una exposición portátil le confiere ciertas características y peculiaridades que estimulan o generan también una manera distinta de apreciación. En algunas de las piezas el artista y la curadora no tienen ningún tipo de contacto físico para la organización, es decir, toda la planeación se llevó a cabo a través del internet o de video-conferencias. En esta exhibición los artistas participantes plasman su visión a través de diversos lenguajes, formatos y medios al desarrollar la pieza y planearla anticipadamente.
Al mismo tiempo de una manera metafórica, la muestra alude a las maletas Boîte-en-valise creadas por Marcel Duchamp entre 1935 – 40, quien dijo que todo lo importante que ha producido cabe en una maleta y que cada una de ellas representa un museo del artista. El otro proyecto curatorial, al que de alguna forma hace referencia la exhibición, es Las Maletas de Tulse Lupe de Peter Greenaway, exposición que acompaña la presentación de las tres películas con el mismo nombre. Las 92 maletas representan por medio de su contenido el mundo y la vida del personaje principal.
La Invitación se extendió al público en general para que se acercara a las obras con cierta disposición a la reflexión sobre las temáticas que se tratan en la muestra, como son procesos políticos y sociales, sistemas naturales y formas de percepción.